No pensaba contaros esto porque está implicado un menor, pero a la vista de la difusión que se le ha dado por otros medios, voy a hacerlo, aunque protegiendo la identidad del chaval quien, aparentemente, es el que puso todo esto en marcha.
El domingo pasado nos llegó desde Puentedeume un e-mail en el que nos contaban que en las redes sociales de grupos radicales, estaba circulando la foto de un grupo de alumnos del IES Breamo posando dentro del instituto en un acto de enaltecimiento a los fanáticos acusados en el juicio por reventar violentamente la manifestación de Galicia Bilingüe. En efecto, pudimos comprobar que en varias cuentas de twitter, se mostraba a un grupo de unos cuarenta estudiantes que portaban el lema de la campaña de la banda terrorista Resistencia Galega de apoyo a los acusados (no olvidemos que uno de los acusados pertenece a la banda y está condenado a casi 9 años de cárcel). Para darle más color a la foto, se mostraba una bandera nacionalista+socialista bien grandecita. Todo ello con el patio del recreo como telón de fondo.
El lunes le enviamos un escrito a la Consellería, que acompañamos con captura de imágenes de internet para que pudieran seguirle la pista al asunto. De lo que vimos en internet, parecía que el sarao lo había puesto en marcha un alumno del centro, que a su vez es miembro de un grupo independentista juvenil, pero tampoco podíamos descartar que a él lo hubieran utilizado como escudo profesores, o incluso la directiva del centro. Ya sabemos que cuando en un centro de enseñanza hay nacionalistas, suelen ofrecerse a formar parte de los equipos directivos, que lo de esta gente es un apostolado 24 horas. Aun a riesgo de que esto fuera así, me pareció lo correcto avisar al director sobre nuestra queja a la Xunta. Como profesora me puse en su lugar; es muy desagradable recibir la visita de un inspector y no saber de qué te está hablando. No le envié el escrito, sólo la imágenes.
A partir del miércoles, como en un circo de los años veinte, comenzaron a sumarse al espectáculo los demás miembros del elenco de rarezas sociales, desde Nós-UP hasta la Mesa pola Normalización lingüística. Se hicieron eco de nuestra queja, dieron a conocer que se le había abierto un expediente a un alumno, y comenzaron una campaña de apoyo al estudiante. No hace falta que os explique que las campañas de apoyo de la casta talibán llevan inherentes la difamación y el insulto hacia las personas que aún creemos que en los centros de enseñanza no se debe ensalzar la violencia y que la politización de los mismos es inaceptable en una democracia; en suma, los que creemos que esto aún no es la selva. Como ayer el conflicto ya había saltado desde las redes sociales a los medios nacionalistas, y desde estos a los periódicos normales, nos pusimos en contacto con Diario de Ferrol y con la Voz de Galicia para que supieran con datos que lo que se les estaba vendiendo como un acto en favor del gallego, era lo que era. Hoy esos medios lo han publicado y también han recogido la postura de la Consellería de Educación que, por fin, parece que está mostrando un poco de sensatez. Como sé que leen este blog, voy a pedirles algo: apoyen al director. En esta teocracia lengua/nacionalismo, el que cuestiona el dogma lo paga. Sabemos que la situación se está volviendo complicada para él en el centro y que desde fuera se están poniendo todos los inquisidores al frente del asador para que no soporte la presión. Ayer tarde los talibanes empezaron a distribuir la dirección de e-mail del centro para que lo achicharren a mensajes "cariñosos", y en un medio de la causa podía leerse la siguiente advertencia.
"O director é um objectivo legítimo"
En fin, nosotros hemos cumplido con nuestra obligación; ahora la pelota está en el tejado de la administración. Espero que el gobierno del PP haya tomado nota de lo que les pasa a los partidos que dejan tirados a sus electores. A ver si, por ejemplo, se ponen manos a la obra con el problema de la ideologización de los centros de enseñanza. El día que comenzó el juicio contra los 12 fanáticos, entre los que apoyaban a los violentos a la puerta del los juzgados había una chica muy joven. Hace 5 años la captaron para el equipo de normalización de su instituto, se convirtió en la sombra del sacerdote normalizador del centro, después alcanzó el grado de novicia y, por lo que he visto, ya ha tomado los hábitos. Tenemos derecho a llevar a nuestros hijos a estudiar a un centro público sin correr el riesgo de que nos los metan ni en un grupo neonazi ni en Resitencia Galega.
Feliz semana a todos, amigos. Salid a pasear, id al cine, escuchad música, leed, comed chocolate, disfrutad de la vida de la manera que más os plazca, la semana próxima espero poder contaros más cosas y más agradables.